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El Ayuntamiento de Morón va a nombrar hijo predilecto a una persona que ni nació ni vivió en la localidad

diariodemoron.com|Morón|19/02/15

El Ayuntamiento de Morón de la Frontera va a nombrar hijo predilecto a título póstumo a una persona que no nació ni vivió en la localidad. Nicolás María Rivero era natural de Sevilla, nacido en Sevilla el 19 de marzo de 1815, siendo cristianado al día siguiente en la Parroquia de San Lorenzo. Sus padres eran Diego Rivero y Teresa Morón, tal y como consta la partida de bautismo en poder de Diario de Morón.

El pasado 19 de diciembre saltaba la sorpresa en la jornada de clausura del Congreso Nacional "Nicolás María Rivero. Parlamento y Democracia", evento patrocinado entre otros organismos por la Universidad de Sevilla, el Congreso de los Diputados, el Parlamento de Andalucía o el Ayuntamiento de Morón de la Frontera, y que durante tres meses, en sus sedes de Madrid, Sevilla y Morón, ha abordado la vida y obra de este destacado político decimonónico, que entre otros cargos llegó a ocupar la alcaldía de Madrid, el Ministerio de Gobernación o la presidencia del Congreso de los Diputados.

Hasta la fecha indicada no se sabía con certeza la naturaleza de Rivero, pues si bien siempre le consideró originario de Sevilla –donde por cierto, reposan sus restos en el Panteón de Sevillanos Ilustres-, en 1901 el periodista Eduardo de Lustonó contradijo esta creencia señalando que había nacido en Morón en febrero de 1814. Casi dos décadas después, en junio de 1919, el historiador Mario Méndez Bejarano impartió una conferencia en la Real Academia de Jurisprudencia de Madrid en la que apoyaba esta versión, aportando además datos precisos acerca de su origen.

Según Méndez, a las once de la noche del día 3 de febrero de 1814 se depositó un niño en la Casa de Expósitos de Morón, el cuál fue bautizado al día siguiente en la Parroquia de San Miguel con el nombre de Blas Nicolás María, que habría de ser en un futuro el reputado político. Entre la documentación aportada por el escritor sevillano, además de la partida de bautismo, se incluyeron los asientos de la Casa Cuna, entre los cuales figura una nota que fue desatendida en su día, y que según el investigador moronense Juan Diego Mata Marchena, autor de la ponencia que ha desentrañado la verdad, adquiere capital importancia.

La misma dice literalmente:"Nº 6.- Blas murió y lo firmé. Fernández (Rúbrica)", lo que viene a indicar indefectiblemente que la criatura falleció. Asimismo en los asientos de caudales se vuelve a hacer referencia al óbito del párvulo, del que se anotó "murió", ocurriendo su deceso hacia el 10 de junio de aquel año de 1814.

El expediente matrimonial de Nicolás María

Por tanto queda claro que el niño depositado el 3 de febrero de 1814 en la Casa de Expósitos de Morón y bautizado al día siguiente en la moronera iglesia de San Miguel nunca pudo llegar a ser Nicolás María Rivero, pues pereció con apenas cuatro meses de vida. Entonces, ¿dónde y cuándo nació este personaje? ¿cuál era su alcurnia?

Como bien aclaró en su conferencia Juan Diego Mata, las respuestas a tales interrogantes se encontraban en el expediente matrimonial de Nicolás María, que en 1846 se casó con la ecijana Loreto Custodio. Conforme a la normativa eclesiástica, en el citado expediente debían incluirse las partidas de bautismo de los contrayentes, así que todo pasaba por localizarlo en el Archivo del Palacio Arzobispal de Sevilla.

Una vez encontrado el legajo, la verdad salió a relucir, revelando el asiento bautismal que Nicolás había nacido en Sevilla el 19 de marzo de 1815, siendo cristianado al día siguiente en la Parroquia de San Lorenzo. Sus padres eran Diego Rivero y Teresa Morón, apellido este que quizá diese pie a la confusión que tantos años ha reinado sobre sus orígenes.